TUTORIALES
GRATUITOS
COMO DIBUJAR RETRATOS
Capitulo 1
El dibujo de la cabeza
|
La ejecución del retrato en dibujo
requiere mucha precisión, aun más que la necesaria para dibujar
la figura humana, sobre todo en lo que se refiere al ajuste de
medidas y a la aplicación de las proporciones. Además, la
captación en toda su intensidad de la expresión del rostro exige
una sensibilidad especial por parte del artista. Y no basta con
la exactitud y la sensibilidad, a ello hay que añadir una
factura del dibujo que ofrezca un interés plástico, lo que
redundará en la calidad estética de la obra.
|
Todas estas dificultades deben ser
superadas por el dibujante comparando las dimensiones del rostro con
los instrumentos de medida, educando su capacidad de observación y
eligiendo la técnica más apropiada a cada tipo de retrato. La
búsqueda, en definitiva, de referencias verticales y horizontales en
el modelo, mediante la varilla y la plomada deberá reflejarse en el
papel de dibujo como primer paso del retrato. Una vez ajustadas las
proporciones, será preciso trasladar al soporte la expresión del
modelo, para lo cual el dibujante deberá observarla con detenimiento e
insistencia.
Finalmente, será muy importante la localización del dibujo dentro del
papel, dejando siempre más espacio en blanco en la parte superior que
en la inferior y también dejaremos un espacio despejado ante la
mirada.
|
La cabeza es, sin lugar a dudas, el
elemento más importante y expresivo de la figura humana. Por
ello constituye un tema de constante interpretación en el arte,
ya que reúne y manifiesta todas las sensaciones que nos
identifican. |
Dentro de la figura humana, la cabeza es
la parte del cuerpo que más tiempo contemplamos, pues ella es quien
nos mira, nos habla y, en suma, nos comunica los sentimientos y la
propia personalidad del individuo con mayor precisión que cualquier
otro elemento del cuerpo.
Un estudio importante para el dibujo de la
cabeza es el análisis de las proporciones generales, que preocupó
excesivamente a los artistas del Renacimiento. Sin embargo, como vimos
en la figura humana, será el trabajo a partir del natural el que dote
al dibujante de la necesaria experiencia para conocer y dominar esta
parte del cuerpo.
Finalmente, tan imprescindible es el conocimiento de las proporciones
como la representación exhaustiva de las diferentes partes del rostro,
que serán los elementos identificadores y significativos de cualquier
expresión humana concreta.
MAS TUTORIALES>>
|